El pasado jueves Ecologistas en Acción Sierra Bermeja secundó una
manifestación por las calles de Estepona para protestar por el futuro del pinar
de Matas Verdes. Bajo el lema de «no se cortará un solo árbol en el complejo
dunar Saladillo-Matas Verdes», mostraban su oposición a que una promotora
instale un hotel-spa de talasoterapia en la zona.

El alcalde de Estepona, José María García Urbano, ha valorado que
«afortunadamente la Constitución Española prevé que toda persona pueda expresar
su opinión como quiera, y en este caso fue con una manifestación, aunque tengo
entendido que fue poca gente».

El primer edil insiste en que «el Ayuntamiento lo que ha hecho ha sido dar
curso a una propuesta que ya estaba presentada en el Consistorio hace
varios años, que cuenta con todos los informes medioambientales, y que
es absolutamente sostenible».

García Urbano asegura que el proyecto es «respetuoso con el medio ambiente.
Las dunas no se van a tocar, y no se va a tocar un solo árbol».

Además, y contradiciendo la postura del colectivo ecologista, asegura que se
trata de un «proyecto sanitario». Ha argumentado también que lo que
Estepona necesita «por encima de cualquier otra cuestión, es que se genere
empleo; tenemos más de 9.000 parados y cualquier propuesta que ayude a sacar a
personas del desempleo, tenemos que apoyarla».

Según el alcalde el proyecto contempla la construcción de una clínica «del
máximo nivel mundial, de la máxima categoría, y respetuosa con el medio
ambiente. A partir de ahí es un proyecto que cumple con todas las garantías y el
Ayuntamiento va a seguir adelante con la tramitación».

El expediente se encuentra actualmente en manos de la Junta de Andalucía.
«Tanto los técnicos del Ayuntamiento como de la Junta han hecho un estudio
preliminar y han dado un sí, afirmativo y rotundo, a ese proyecto tan respetuoso
con el medio ambiente», concluyó García Urbano.