La Comunitat Valenciana cuenta ya cuenta con 67 parajes naturales protegidos
que suman un total de 28.082 hectáreas, después de que el pleno del Consell haya
aprobado la ampliación del paraje del ‘Pozo del Junco’ situado en la localidad
de El Toro en Castellón.

En lo que se lleva de año, el Consell ya ha aprobado la declaración de cuatro
parajes naturales: la Sierra de las Águilas y San Pascual en ‘Cinc Germans’ en
Canals y Barrancos Carrasca-Gatillo en Enguera.

El pleno del Consell de este viernes ha aprobado la ampliación de la zona
protegida del paraje natural Pozo del Junco, así como el plan especial de
protección de este paraje. Con esta medida, este espacio protegido pasa a tener
un total de 45,31 hectáreas, frente a las siete que tenía en la actualidad.

El plan especial de protección elaborado por el Ayuntamiento de El Toro es un
documento técnico que incluye una memoria informativa, una memoria
justificativa, la normativa que regula los usos y actividades, los planos y el
correspondiente Estudio de Impacto Ambiental.

UNO DE LOS MEJORES EJEMPLOS DE ‘BOSQUE HORIZONTAL’.

El paraje Pozo del Junco destaca por su interés botánico, ecológico,
geomorfológico y paisajístico. Se trata de uno de los mejores ejemplos del
hábitat denominado ‘bosques
horizontales’, junto con los existentes en las cumbres de la sierra de
Javalambre, en la provincia de Teruel, y los de la
Puebla de San Miguel en la provincia de Valencia (Rincón de Ademuz).
Además, este hábitat está muy poco representado en el conjunto de la Comunitat
Valenciana, lo que incrementa aún más su valor.

El enclave presenta un gran valor botánico debido al sabinar rastrero,
formación predominante en el paraje, que representa un ecosistema
de alto interés en la Comunitat Valenciana, considerado «hábitat prioritario»
por la
Unión Europea.

El Pozo del Junco también destaca por su fauna. Este Paraje castellonense
alberga ejemplares incluidos en el Catálogo Valenciano de Especies Amenazadas de
Fauna, entre las que destacan los mamíferos carnívoros, como el gato montés y la
gineta, grandes rapaces como las águilas real, perdicera y culebrera que
utilizan el paraje como zona de campeo y cazadero, o los numerosos anfibios que
utilizan los navajos. Estas navas atraen también a una variada fauna, debido a
que se trata de unos de los escasos puntos de agua que existen en estas
latitudes.

Entre los numerosos lepidópteros, la posible presencia de la mariposa apolo,
especie de alta montaña muy rara en la Comunitat Valenciana o, en las zonas más
boscosas, la mariposa nocturna Graellsia isabellae.