El término municipal de Zaragoza capital cuenta con 1.714 especies
diferentes, de las cuales 1.302 son de flora y 402 de fauna, una biodiversidad
que se encuentra en un momento preocupante debido a la amenaza del cambio
climático y las especies invasoras. Así se desprende de la Estrategia para la
Conservación de la Biodiversidad de Zaragoza aprobada por el Gobierno de la
ciudad para consolidar la diversidad biológica y paisajística del término,
promover el equilibrio entre conservación y el uso sostenible de los recursos
naturales, reducir las amenazas actuales o futuras e integrar estos elementos en
la política y gestión municipal. El consejero de Medio Ambiente del Ayuntamiento
de Zaragoza, Jerónimo Blasco, ha presentado en rueda de prensa el contenido de
esta estrategia, que busca además la implicación de los habitantes de la ciudad
en la preservación de su valioso patrimonio natural. Para alcanzar sus
objetivos, la Estrategia para la Conservación de la Biodiversidad de Zaragoza
cuenta con 21 indicadores, basados en otros sistemas de evaluación europeos,
estatales y locales. Las cinco áreas temáticas en las que se dividen esos
indicadores son el estado y tendencia de los componentes de la biodiversidad,
las amenazas, uso sostenible, la opinión pública y el estado de transferencia y
utilización de recursos que se seguirán de forma trimestral. Según este
documento, el término municipal presenta unas especiales condiciones
territoriales y físicas que propician la existencia de un valioso patrimonio
natural que se manifiesta en una significativa, variable y singular riqueza
natural, que debe ser objeto de las oportunas medidas para fomentar su
protección y conservación. El 40 por ciento del suelo municipal dispone de
alguna figura de protección oficial, ya sea LIC (Lugar de Importancia
Comunitaria), ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) o zonas
singulares protegidas por el Plan Especial de Ordenación Urbana. Al inicio de la
década, la ciudad contaba con 3.200.000 metros cuadrados de zonas verdes, una
cifra que en 2010 ascendía a 8.270.000 metros cuadrados, gracias al crecimiento
de la ciudad y la celebración de la Expo de 2008, lo que significa que la ratio
por habitante censado está en este momento en 11,74 metros cuadrados por
habitante, uno de los mejores de España. Según Blasco, uno de los grandes retos
para el futuro, además de seguir consolidando la naturaleza urbana, es mejorar
las conexiones entre los grandes espacios verdes existentes, creando un
verdadera malla verde que sirva de elemento vertebrador del entorno urbano de
Zaragoza. Pero también poner en marcha directrices, criterios e indicadores que
permitan un alto nivel de conservación de la diversidad biológica y un uso
sostenible de sus componentes debido al preocupante estado de la biodiversidad
por factores como el cambio climático o la introducción de especies exóticas
invasoras. Según recuerda el Ayuntamiento, la protección del medioambiente es un
ámbito competencial de acción municipal que se ha convertido en los últimos años
en una creciente preocupación social y uno de los objetivos fundamentales del
desarrollo de las políticas públicas municipales, debido en parte a los
compromisos que el Consistorio ha suscrito en materia de biodiversidad. La
trayectoria de la política municipal en materia de protección del medioambiente
es dilatada y cuenta con importantes logros, especialmente en la conservación o
protección del agua o la atmósfera, que han culminado recientemente con la
aprobación de las Estrategias de Adaptación y Mitigación del Cambio Climático o
la Ordenanza de Ecoeficiencia y Calidad en la Gestión Integral del Agua.